Historias sobre perros y gatos

Es quizás una de las pelis que más me gustan.
Trata sobre una veterinaria que trabaja dando consejos en la radio, y un buen día saca de un buen lío a un radioyente. Éste, se empeña en llevarle un regalo. Cuando ella lo ve, decide que no es lo suficientemente guapa para él y se escabuye como puede.
Él sigue queriendo agradecerle el favor, así que ella le pide a su vecina, amiga suya y supermodelo, que se haga pasar por ella. La veterinaria se hace pasar por una amiga, y así, el chico se enamora de la personalidad de la veterinaria y del físico de la supermodelo.
Aparte de las mil peripecias que pasan para que el chico no se entere de la mentira, la historia de cómo las dos amigas se enamoran de él y cómo lo llevan para no perder la amistad, es, cuando menos curiosa.
El caso es que, cada una, interpretando un papel falso a los ojos del chico, establece un lazo distinto. La supermodelo utiliza sus armas de mujer despampanante y descubre que aún quedan chicos dulces, y la veterinaria le abre su corazón mostrándose tal y como es... hasta que decide contárselo. Pero es demasiado tarde, porque él ya se ha enterado de quién es quién.
Obviamente, el chico se siente engañado y utilizado, y no quiere volver a saber de ninguna de las dos. Aunque la veterinaria, al no tener ya nada que perder, va a verle y simplemente le cuenta la verdad: que cuando le vio aparecer en la emisora sintió miedo, porque aunque por dentro fuera una mujer preciosa, no tenía el envoltorio perfecto...
Después de darle muchas vueltas, de sopesar todo, de decidir si es lo suficientemente superficial o escuchaba realmente su corazón, el chico va a buscar a la veterinaria a la emisora. Se da cuenta de que tenía razón, de que, si desde un primer momento la hubiera visto tal y como era, seguramente no le habría hecho ni caso, sin embargo, la echaba de menos, había descubierto que era un persona increíble y que, después de conocerla, ya no podía vivir sin ella...
Sencillamente precioso.